Supongo que esta semana muchos de ustedes celebrarán bien el Solsticio (del 21 al 22 de Junio) o bien la Noche de San Juan (del 23 al 24), o incluso ambas, dependiendo del Hemisferio en el que residan, será verano o invierno; les recuerdo que si bien la festividad se considera la misma, no son exactamente lo mismo, pues una sigue la tradición pagana y otra es cristiana si bien deriva de la anterior.
Sea como sea, les dejo un ritual de limpieza, carga y protección muy sencillo y que les vendrá bien. Es como se suele decir, un tres en uno.
El elemento principal es el agua, ya que en esta celebración se ponen de relieve el fuego como símbolo de purificación, agua como símbolo de pureza y fecundidad y plantas como símbolo de renacimiento y sanación.
Para ello necesitamos un cuenco, bien de cristal bien de barro en el que pondremos agua y sal marina donde meteremos nuestros talismanes, joyas y si tuviéramos, también conchas de la playa y piedritas del río, que cuando llegue el momento podremos utilizar en nuestro altar con fines protectores y de fecundidad, también en la casa para atraer la prosperidad. Se dejarán al influjo de la Luna durante toda la noche y bien temprano, cuando amanezca, se retiran del agua y se secan.
El agua que hemos utilizado, ojo! no se tira, sino que se almacena en una botella de vidrio que usaremos todo el año para limpiar la casa, añadiendo un chorro en el agua de fregar los suelos, o en la de limpiar las ventanas y las puertas.
Una vez hacemos la limpieza, echamos este agua sobrante al wáter y tiramos de la cisterna tres veces.
